08 Nov Criterios ESG en telecomunicaciones: desafíos y oportunidades para operadores
El sector de las telecomunicaciones vive un momento delicado y apasionante, al mismo tiempo. Además de afrontar una serie de cambios de paradigma en lo relativo a los activos tecnológicos implicados en su actividad —donde la inteligencia artificial es solo unos de ellos—, también debe pensar en los objetivos de desarrollo sostenible, en la Agenda 2030, en la sostenibilidad de su modelo de negocio a largo plazo y en otros criterios ESG.
Esto mientras, de manera simultánea, debe afrontar la atracción y la retención de talento, el trabajo remoto y la automatización, los cambios en los hábitos de consumo o la creciente implantación del Internet de las Cosas, por citar aleatoriamente algunos factores de una lista mucho más larga. Los desafíos y las oportunidades no escasean.
Qué son los criterios ESG
Hablamos de criterios ESG (Environmental, Social and Governance) cuando hacemos referencia a una serie de estándares que todas las empresas, de todos los sectores, observan, monitorizan e implementan para establecer las políticas más adecuadas en materia de sostenibilidad medioambiental, de gobernanza o funcionamiento interno y de impacto social. Puede decirse que los criterios ESG son la evolución en el siglo XXI de la Responsabilidad Social Corporativa (RSC) de hace unas décadas.
Engloban estos criterios las políticas de gestión de residuos, huella de carbono, utilización y reciclaje de materiales, eficiencia energética o el impacto en la biodiversidad, por ejemplo. También tienen en cuenta las condiciones laborales, las políticas de integración laboral y conciliación, la integración de colectivos en riesgo de exclusión o la interacción con las comunidades. La ética y la cultura corporativas, la lucha contra la corrupción la estructura y funcionamiento interno y el cumplimiento de normas también forman parte de los criterios ESG.
Criterios ESG en el mercado de las telecomunicaciones
Aunque el sector de las telecomunicaciones, como cualquier otro, está constantemente procurando mejorar y alcanzar estándares altos en lo relativo a los criterios ESG, dadas las características de su actividad y los retos a los que se enfrenta, está especialmente centrado en aquellos que tienen que ver con la sostenibilidad y el consumo energético, así como en su impacto social.
La sostenibilidad y la energía, especial preocupación de las telecos
La existencia de centros de datos cada vez más grandes y demandantes a nivel energético, junto a las infraestructuras de la tecnología 5G hacen del sector de las telecomunicaciones uno de los principales consumidores de electricidad global —en torno a un 2% o 3% del total del planeta—.
Al consumo de electricidad se suman la generación de residuos y la utilización de componentes no reciclables en muchos dispositivos, así como la increíble demanda energética que conlleva la computación con modelos de inteligencia artificial. La eficiencia energética, el uso de material reciclado y la gestión de residuos, forman parte de las preocupaciones estratégicas del sector, en lo relativo a criterios ESG, que también están intentando implementar procesos dentro de la economía circular.
Además del asunto energético, el impacto social que conlleva el no poder acceder a tecnología de conectividad, tener acceso a Internet o disponer de transmisión de datos rápida y fiable, sobre todo en comunidades de países en desarrollo y en algunas zonas especialmente tensionadas, forman parte de los retos de futuro para el mercado de las telecomunicaciones.
Oportunidades para el sector, atendiendo a criterios ESG proyectivos
Una mayor y mejor responsabilidad ambiental, un mercado comprometido con la sostenibilidad y unos directivos decididos a favorecer un impacto positivo, ético y de valor para las comunidades con las que tienen contacto, siquiera de tercer o cuarto nivel. Este escenario de futuro es el que pueden construir las empresas del sector de las telecomunicaciones si utilizan los criterios ESG como «hoja de ruta» para un presente y un futuro prometedor.
Además de obtener mejores resultados económicos por cuidar estos criterios —algo ya demostrado por algunos estudios académicos prestigiosos—, la adopción de una política ESG exigente puede abrir la puerta a las empresas de telecomunicaciones para adoptar una posición de liderazgo en la transformación de la sociedad. Algo que siempre ha hecho, históricamente, pero que puede adquirir una nueva dimensión bajo este prisma.