Por suerte, existen varias modalidades de conexiones de red que nos hacen la vida mucho más fácil. En los entornos laborales, en la vida personal y en prácticamente todas las esferas de nuestro día a día. Por eso las conexiones de red rápidas, seguras, eficientes y con capacidad para transmitir grandes cantidades de información son imprescindibles, actualmente. Y también por eso tecnologías como la fibra óptica, el 5G y otros tipos de conexiones de baja latencia están buscando constantemente superar sus propios límites. La mmWave o banda milimétrica es un claro ejemplo de esto último.

mmWave: conexiones de red inalámbricas tan rápidas como al fibra óptica

La mmWave —banda milimétrica en castellano— está asociada a la tecnología 5G, es decir, es una conexión de redes inalámbrica. El 5G ha sido desde los inicios de su implantación la promesa de un gran ancho de banda, una latencia muy baja y una velocidad de respuesta en dispositivos móviles mucho más rápida que sus «hermanas menores», el 4G y el 3G. Pero para que las conexiones de red 5G expriman su potencial ha sido necesario implementar diversas soluciones.

La banda milimétrica es una de ellas. Y recibe este nombre debido a uno de los parámetros clave de estas conexiones de red inalámbricas: la frecuencia. Cualquier señal inalámbrica vincula frecuencia y longitud de onda. Cuanto más alta es la frecuencia de cualquier señal más corta es la longitud de onda, es decir, a distancia entre una onda y la siguiente. La mmWave pertenece a la franja más elevada del espectro radioeléctrico, por lo que su frecuencia es altísima y la distancia entre las ondas de frecuencia es muy corta. De ahí este «sobrenombre».

Aspectos positivos de la banda milimétrica

Al asignar a un operador una fracción alta del espectro, como el caso de la mmWave, este podrá hacer uso de todo el ancho de banda, con mucha capacidad disponible. Esto permitirá «exprimir» las conexiones de red inalámbricas para que ofrezcan un caudal de datos con baja latencia que puede equipararse prácticamente con la performance de la fibra óptica.

Muy buena conexión, pero no en todas partes

Sin embargo, esta «potencia» y versatilidad de señal tiene una contrapartida: se atenúa rápido, por lo que no puede recorrer grandes distancias o atravesar fácilmente determinados obstáculos sólidos. La mmWave, por tanto, se plantea como una solución para conexiones de red exigentes en contextos muy determinados y físicamente delimitados: eventos masivos, conexiones en transportes como el tren o en avión, aeropuertos, etc.

En España estas conexiones de red tendrán que esperar

Las conexiones de red en la franja alta de frecuencias, donde se ubica la banda milimétrica, ya están disponibles. De hecho se produjo la subasta de doce bloques de 200 MHz, a finales del año 2022, por lo que las principales operadoras ya están desarrollando proyectos con la mmWave. No obstante son las mismas operadoras de telecomunicaciones las que reconocen que, de momento, la demanda real de este tipo de conexiones de red inalámbricas es baja. Casi con seguridad porque no es una posibilidad que sea conocida aún por el gran público.

No obstante, ese momento terminará llegando a medio plazo. Y gracias al potencial del ancho de banda del mmWave viviremos un buen momento en términos de conectividad en lugares que actualmente generan problemas por la alta demanda. En ese sentido basta entender que cada bloque de 200 MHz entrega una eficiencia espectral en el mejor de los casos de unos 2,5 Gbps de descarga y 750 Mb de subida a un terminal 5G convencional.